Month: mayo 2019

El Señor proveerá

Mi ansiedad aumentaba durante el verano mientras pasaba de la escuela secundaria a la universidad. Me encanta tener todo planificado, y la idea de irme a vivir lejos de mi casa a estudiar y sin un trabajo me hacía sentir incómoda. Sin embargo, pocos días antes de dejar mi empleo de verano, me pidieron que siguiera trabajando a distancia para la misma empresa. Acepté, y sentí paz al saber que Dios se ocupaba de mí.

Ministro de la soledad

Después de la muerte de su esposo, Beatriz ha pasado la mayoría de los días en su apartamento, mirando televisión y preparando té para ella sola. Pero no está sola en su soledad. Más de nueve millones de británicos (el 15% de la población) dicen que a menudo o siempre, se sienten solos; y Gran Bretaña ha designado a un ministro de la soledad para averiguar su origen y cómo ayudar.

La mejor estrategia de vida

Mientras mirábamos el partido de básquet de mi hija, escuché que el entrenador les decía una sola palabra: «Dobles». De inmediato, la estrategia defensiva pasaba de uno a uno a dos que se juntaban frente a la contrincante más alta que tenía el balón. De ese modo, lograban impedir que tirara y encestara, para finalmente llevar la pelota hacia el otro campo y encestar en su canasta.

Tazón de lágrimas

En Boston, Massachusetts, una placa titulada «Crossing the Bowl of Tears» [Cruzando el tazón de lágrimas] conmemora a aquellos que desafiaron el Atlántico para escapar a la muerte durante la catastrófica hambruna en Irlanda a finales de la década de 1840. Más de un millón de personas murieron, mientras otro millón o más dejaron sus casas para cruzar el océano, al que John Boyle O’Reilly poéticamente llamó «tazón de lágrimas». Impulsados por el hambre, la angustia y la desesperación, estos viajeros buscaron un poco de esperanza.

Alguien que guía

¿En quién piensas cuando oyes la palabra mentor? Yo, en el pastor Rich. Él vio mi potencial y creyó en mí cuando ni siquiera yo creía en mí misma. Fue un ejemplo de cómo guiar sirviendo con humildad y amor. El resultado es que, ahora, yo sirvo a Dios enseñando y aconsejando a otros.

¡Ven y tómalo!

Espié por encima de la cerca de paneles que rodea nuestro patio trasero y vi gente que corría, trotaba, caminaba y arrastraba los pies por el sendero del parque detrás de casa. Yo solía hacer eso cuando estaba más fuerte, pensé. Y me envolvió una ola de insatisfacción.

Poco pero significativo

El día empezó como cualquier otro, pero terminó en una pesadilla. Ester (no es su nombre verdadero) y varios cientos de mujeres fueron secuestradas de su internado por un grupo militante religioso. Al mes, fueron liberadas, excepto Ester, que rehusó negar a Cristo. Leer con mi amiga sobre ella y otros que son perseguidos por su fe nos conmovió. Queríamos hacer algo, pero ¿qué?

Más que simplemente esperar

La policía multó a una mujer por conducir imprudentemente tras haberse montado a la acera y regresado a la calle porque no quería esperar que un autobús escolar bajara a los estudiantes.